LD_Adolescentes hoy: transiciones en la hipermodernidad (1/5)
La adolescencia es una época atravesada por una serie de cambios que responden a un proceso de transformación física. Dichos cambios producen desconciertos ante un real que horada el cuerpo y el saber constituido, haciendo que los recursos simbólicos no alcancen ante las nuevas exigencias de un apremio pulsional inevitable.
El adolescente se enfrenta a nuevos escenarios que le empujan a buscar referentes donde sostener lo que está por llegar. La clave de esta etapa se encuentra en la metamorfosis de la pubertad, a un despertar de la sexualidad, al amor y a nuevos encuentros. No hay preparación posible ante esta metamorfosis, cada uno la atraviesa como puede y según su modo particular de goce.
La adolescencia viene a despedir la infancia, a decir que el crecimiento es una realidad corporal que liquida un pasado que parecía eterno. Además se incorpora la exigencia de definición en cuanto al género y orientación sexual. Etapa, en fin, de un ingente esfuerzo subjetivo que implica preguntarse sobre el sentido de la existencia.
Corren tiempos hipermodernos en Occidente. En esta hipermodernidad, descrita por Lipovetsky, se vive a un ritmo acelerado; no hay tiempo para elaborar el malestar. Se intenta sacudirlo antes, incluso, de sentirlo. El vértigo de lo cotidiano produce sujetos que huyen del dolor y se anestesian en el hiperconsumo de bienes, sustancias, sexo e internet. ¿Cómo se juega la adolescencia en este nuevo orden de cosas? Haremos alusión en los siguientes posts a tres ámbitos de la hipermodernidad para trazar los desafíos de los adolescentes de hoy: la “permisividad”, el “hiper-individualismo”. y la “la economía del goce”.
Reyes González Anglada.